Siempre pudo ser mejor pero no más intenso.
Del cielo al infierno en nada, aunque viviendolo como un todo.
Una calita bonita llena de medusas. Me quise bañar y no pude.
Sin reproches. Ellas tampoco decidieron tener tanto veneno.
No todo el monte es orégano ni oro todo lo que reluce.
Ni lo que reluce luce a mi lado, por desgracia.
Escupo los pelos que dejaste en mi cama y me trago las ganas de que los vuelvas a dejar.
Te condeno a que el TE ADORO de esta mañana se postergue para siempre más en tu existencia.
sábado, 29 de mayo de 2010
sábado, 15 de mayo de 2010
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